El concepto de «Cargas Emocionales» es una parte fundamental del modelo de Richard Schwartz y el Instituto IFS. Este modelo describe la psicología de la persona como un sistema de partes internas que interactúan entre sí y cada parte puede tener su propia carga, y estas cargas pueden afectar la forma en que se comporta la persona.
Para entender mejor las cargas internas, es importante tener una idea clara de cómo funciona el modelo IFS. Según este modelo, cada persona tiene un conjunto de partes internas que representan diferentes aspectos de su personalidad. Por ejemplo, alguien puede tener una parte que es crítica, otra que es compasiva, otra que es ansiosa, etc.
Estas partes interactúan entre sí y pueden estar en diferentes estados de ánimo o emociones en diferentes momentos. Por ejemplo, la parte crítica puede tomar el control cuando alguien está en una situación estresante, mientras que la parte compasiva puede hacerse cargo cuando alguien necesita consuelo.
Cada una de estas partes en general pueden tener una carga asociada. La carga es una especie de energía emocional que la parte lleva consigo dependiendo de la experiencia que la haya generado. Por ejemplo, una parte que ha sido herida o rechazada tendrá una carga negativa.
La carga puede afectar la forma en que la parte interactúa con otras partes internas, así como con el mundo exterior. Una parte con una carga negativa puede ser más crítica, defensiva o cerrada, mientras que una parte con una carga positiva puede ser más abierta, compasiva y amorosa.
En el modelo IFS, el objetivo es ayudar a las partes internas a liberar sus cargas negativas y facilitar la libre y natural expresión de esa parte y por ende de la persona. Esto se hace a través del proceso de «liberación de cargas», en el que se anima a la persona a explorar y comprender las partes internas que tienen una carga negativa. Al comprender estas partes y sus cargas, la persona puede ayudar a liberar la carga y promover un comportamiento más saludable y positivo.
Cómo se desarrollan las cargas internas
Las experiencias tempranas de la vida pueden tener un impacto significativo en la forma en que se desarrollan las partes internas de una persona y en la carga emocional que llevan consigo.
El trauma, el abuso y la falta de apoyo pueden contribuir al desarrollo de cargas negativas en las partes internas de una persona. Por ejemplo, si alguien experimentó abuso emocional o físico cuando era niño, es probable que haya una parte interna que se sienta insegura, ansiosa o enojada. Esta parte puede llevar una carga negativa debido a las emociones y las experiencias dolorosas que ha tenido que soportar.
De manera similar, si alguien creció en un ambiente donde se le dio poco apoyo emocional, puede que algunas partes internas se sientan solas, desesperadas o desesperanzadas. Estas partes pueden llevar una carga negativa debido a la falta de apoyo y amor que han experimentado.
Es importante señalar que no todas las experiencias tempranas de la vida necesariamente llevan a la carga negativa en las partes internas. Algunas experiencias pueden ser positivas y promover el desarrollo de partes internas saludables. Por ejemplo, si alguien creció en un hogar donde se le dio mucho amor y apoyo emocional, es probable que desarrolle partes internas que se sientan seguras, amadas y respetadas.
En resumen, las experiencias tempranas de la vida pueden contribuir al desarrollo de cargas negativas en las partes internas de una persona, especialmente en casos de trauma, abuso y falta de apoyo. Sin embargo, mediante el proceso de liberación de cargas, es posible liberar estas cargas negativas y promover que las partes internas puedan expresarse de forma más saludable.
Ejemplos de cargas
Aquí hay algunos ejemplos específicos de cómo las cargas internas pueden influir en el comportamiento de una persona:
Ejemplo 1 – Situaciones de estrés: Si alguien tiene una parte interna que lleva una carga negativa debido a una experiencia previa de fracaso en una situación similar, puede sentirse ansioso y menos seguro en situaciones similares en el futuro. Esta parte interna puede tomar el control y hacer que la persona se sienta paralizada, lo que puede interferir con su capacidad para manejar la situación de manera efectiva.
Ejemplo 2 – Conflictos interpersonales: Si alguien tiene una parte interna que lleva una carga negativa debido a una experiencia previa de traición o abandono en una relación, puede tener dificultades para confiar en los demás y mantener relaciones saludables. Esta parte interna puede hacer que la persona se sienta a la defensiva o incluso crítica hacia los demás, lo que puede interferir con su capacidad para establecer relaciones satisfactorias.
Ejemplo 3 – Relaciones amorosas: Si alguien tiene una parte interna que lleva una carga negativa debido a una experiencia previa de rechazo o abuso en una relación, puede tener dificultades para establecer relaciones amorosas saludables en el futuro. Esta parte interna puede hacer que la persona se sienta ansiosa o incluso desesperada en las relaciones, lo que puede interferir con su capacidad para establecer relaciones satisfactorias y duraderas.
En resumen, las cargas internas pueden influir en el comportamiento de una persona en situaciones de estrés, conflictos interpersonales y relaciones amorosas, entre otras situaciones. Al comprender y liberar estas cargas negativas, la persona puede ser capaz de manejar mejor estas situaciones y tener relaciones más saludables y positivas con los demás.
Distinguir entre las partes y sus cargas
Es importante tener en cuenta que en el modelo IFS, las partes internas y las cargas son dos conceptos diferentes. Las partes internas representan diferentes aspectos de la personalidad de una persona, mientras que las cargas son la energía emocional que cada parte lleva consigo.
Es común confundir las partes con las cargas, ya que las cargas pueden hacer que una parte se exprese en forma extrema. Por ejemplo, una parte interna que lleva una carga negativa puede expresarse de manera más crítica, defensiva o cerrada de lo que normalmente lo haría.
Las cargas se pueden liberarse
Es importante tener en cuenta que las cargas no son una parte integral de las partes internas. En el modelo IFS, se cree que las cargas son algo que se puede liberar o soltar mediante un trabajo acompañado de un especialista o practicante IFS. Este proceso se llama «liberación de cargas» y tiene como objetivo ayudar a la persona a comprender y liberar las cargas negativas de las partes internas, lo que puede sentirse como una profunda liberación.
Es importante destacar que el proceso de “liberación de cargas” no es algo que se deba hacer solo. Es mejor hacerlo con la ayuda de un especialista o practicante IFS capacitado, ya que puede ser un proceso emocionalmente intenso y complejo.
Beneficios de liberar las cargas negativas
Hay varios beneficios importantes asociados con la liberación de las cargas negativas de las partes internas de una persona. Aquí hay algunos de ellos:
- Reducción del estrés y la ansiedad: Las cargas negativas en las partes internas pueden contribuir a sentimientos de estrés, ansiedad y tensión emocional. Al liberar estas cargas negativas, la persona puede sentir una reducción en estos sentimientos y una mayor sensación de calma y bienestar emocional.
- Mejora de las relaciones interpersonales: Las partes internas con cargas negativas pueden interferir en las relaciones interpersonales de una persona, haciendo que se sienta a la defensiva, crítica o incluso agresiva. Al liberar estas cargas negativas, la persona puede ser capaz de relacionarse mejor con los demás, mostrando más empatía y compasión.
- Mejora de la autoestima y la autoconfianza: Las cargas negativas pueden influir en la forma en que una persona se ve a sí misma, haciendo que se sienta insegura, inadecuada o sin valor. Al liberar estas cargas negativas, la persona puede sentir una mayor autoestima y autoconfianza, lo que puede llevar a una mayor satisfacción con la vida.
- Mayor capacidad para tomar decisiones saludables: Las partes internas con cargas negativas pueden influir en las decisiones que una persona toma, llevándola a patrones de comportamiento poco saludables o autodestructivos. Al liberar estas cargas negativas, la persona puede tomar decisión
La liberación de las cargas negativas de las partes internas puede llevar a una variedad de beneficios, incluyendo una reducción del estrés y la ansiedad, una mejora en las relaciones interpersonales, una mayor autoestima y autoconfianza, una mayor capacidad para tomar decisiones saludables y una mayor capacidad para manejar emociones difíciles.
En conclusión, en el modelo IFS es importante distinguir entre las partes internas y las cargas emocionales que llevan consigo. Las cargas pueden hacer que una parte se exprese en forma extrema, pero no son una parte integral de la parte interna.
En el modelo IFS, el objetivo es ayudar a las partes internas a liberar sus cargas negativas para que puedan ser más saludables y funcionales. Esto se hace mediante el proceso de «liberación de cargas», en el que la persona aprende a comprender las partes internas y a trabajar con ellas para liberar las cargas negativas
Las cargas se pueden liberar o soltar mediante el proceso de liberación de las cargas, que se realiza mejor con la ayuda de un especialista o practicante IFS capacitado.
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