El Self Completo

Desmitificando su necesidad de Fortalecimiento

En el modelo de Sistemas de Familia Interna (IFS), desarrollado por Richard Schwartz, surge una pregunta frecuente entre los practicantes y los clientes: “¿Cómo puedo fortalecer el Self a diario?”. Esta cuestión, aunque válida, parte de una suposición incorrecta. El Self, según IFS, es siempre completo y está en su máxima capacidad. No necesita fortalecerse, sino que debemos trabajar con nuestras partes para permitir que el Self se manifieste plenamente.

¿Qué es el Self en IFS?

El Self, en el contexto de IFS, se refiere a una parte central de nuestra personalidad que es innatamente sabia, compasiva y equilibrada. Schwartz describe el Self como la esencia de quienes somos en nuestra forma más pura y sin la interferencia de nuestras partes más heridas o defensivas.

La Confusión del Fortalecimiento

La idea de fortalecer el Self puede parecer intuitiva, ya que estamos acostumbrados a pensar en términos de crecimiento y mejora personal. Sin embargo, según IFS, el Self no es algo que necesite fortalecimiento porque ya es completo y pleno. La confusión surge de la interacción entre el Self y nuestras partes.

Desmezclar las Partes

Nuestras partes son fragmentos de nuestra personalidad que han asumido roles específicos en respuesta a experiencias de vida. Algunas partes pueden estar heridas y otras pueden haber adoptado roles protectores o defensivos. Cuando estas partes están muy mezcladas con el Self, pueden bloquear nuestra capacidad para experimentar las cualidades del Self.

Aquí es donde entra en juego el trabajo de desmezclar las partes. El objetivo no es fortalecer el Self, sino ayudar a nuestras partes a relajarse y confiar en el liderazgo del Self.

Practicando el Desmezclado

Entonces, ¿cómo logramos que nuestras partes se desmezclen y permitan que el Self lidere? Aquí hay algunos pasos prácticos:

  1. Conciencia y Reconocimiento: Empieza por reconocer las diferentes partes dentro de ti. Nombra y describe cómo se sienten y qué roles desempeñan.
  2. Escucha y Validación: Escucha activamente a tus partes. Valida sus sentimientos y experiencias. Hacer esto crea un espacio seguro para que se relajen.
  3. Curiosidad y Compasión: Acércate a tus partes con curiosidad y compasión. Pregúntales qué necesitan y cómo puedes ayudarlas.
  4. Desmezclar Emocionalmente: Cuando sientas que una parte está tomando el control, respira profundamente y recuérdate que el Self está presente. Visualiza cómo esta parte se relaja y permite que el Self tome el liderazgo.

Ejercicio de Visualización

Un ejercicio útil es visualizar tus partes en una sala de juntas. Imagina que cada parte tiene un asiento en la mesa, y tú, como Self, eres el facilitador de la reunión. Escucha a cada parte, valida sus preocupaciones y explícales que el Self está allí para liderar y guiarlas hacia la sanación.

Conclusión

Fortalecer la calidad del Self no es una tarea que deba realizarse porque el Self ya es pleno y completo. En cambio, el trabajo radica en desmezclar nuestras partes y permitir que el Self lidere con su sabiduría innata. Al practicar la conciencia, la escucha y la visualización, podemos crear un espacio interno donde el Self pueda florecer y guiar nuestro camino hacia una mayor sanación y equilibrio.