En el camino hacia la sanación personal y el autoconocimiento, especialmente dentro del marco de Internal Family Systems (IFS) o Sistemas de la Familia Interna, a menudo encontramos obstáculos internos que pueden llevar al auto-sabotaje. El enfoque de IFS nos permite entender y trabajar con nuestras partes internas, cada una con sus propias motivaciones y emociones, para lograr una mayor armonía y bienestar. Aquí te presentamos 12 formas comunes en las que nuestras partes internas pueden dificultar nuestro avance, cómo podemos empezar a trabajar con ellas, y la buena intención detrás de cada una.
1. Enojo
Sentir ira o frustración hacia uno mismo.
- Ejemplo: “Me enoja que siempre quiera procrastinar en lugar de ser productivo.”
- Esta reacción puede impedirnos ver el valor y la intención detrás de la procrastinación
- Buena intención: Puede estar buscando evitar el estrés o el agotamiento.
2. Vergüenza
Sentirse avergonzado por uno mismo.
- Ejemplo: “Siento vergüenza cuando me pongo nervioso en público y tartamudeo.”
- La vergüenza puede bloquear nuestra capacidad para entender y trabajar con la nerviosidad.
- Buena intención: Podría estar tratando de protegernos de la crítica o el rechazo.
3. Desprecio
Sentir desprecio o desdén hacia uno mismo.
- Ejemplo: “Desprecio que siempre me queje en lugar de buscar soluciones.”
- El desprecio puede ser una barrera para la compasión y el entendimiento.
- Buena intención: Puede estar expresando una necesidad no satisfecha o buscando atención.
4. Miedo
Tener miedo de las consecuencias de las acciones de uno mismo.
- Ejemplo: “Tengo miedo de lo que pueda pasar cuando tomo el control impulsivamente y digo cosas sin pensar.”
- El miedo puede llevarnos a intentar suprimir impulsos, en lugar de entender sus motivaciones.
- Buena intención: Podría estar intentando protegernos de situaciones potencialmente dañinas.
5. Confusión
Sentirse confundido por los sentimientos o acciones de uno mismo.
- Ejemplo: “Me confunde que quiera estar solo cuando normalmente disfruto de la compañía.”
- La confusión puede impedirnos ver los matices y las necesidades de la soledad.
- Buena intención: Puede estar buscando tiempo para la introspección o la recuperación emocional.
6. Rechazo
Querer distanciarse o eliminar una parte de uno mismo.
- Ejemplo: “Quiero rechazar esa parte de mí que siempre duda de mis capacidades.”
- El rechazo puede fortalecer la resistencia interna y dificultar la integración de nuestras partes.
- Buena intención: Esta parte puede estar intentando evitar la decepción o el fracaso.
7. Juicio
Juzgar negativamente las acciones o sentimientos de una parte de uno mismo.
- Ejemplo: “Juzgo esa parte de mí que siente tristeza cuando debería estar feliz.”
- El juicio puede aumentar la tensión interna y dificultar el entendimiento y la empatía.
- Buena intención: Esta parte podría estar intentando mantenernos en un estado positivo.
8. Culpabilidad
Sentirse culpable por los sentimientos o acciones de una parte de uno mismo.
- Ejemplo: “Me siento culpable por esa parte de mí que no puede dejar de pensar en los errores del pasado.”
- La culpabilidad puede ser paralizante, dificultando el progreso y el perdón interno.
- Buena intención: Esta parte puede estar intentando aprender de los errores para evitar repetirlos.
9. Control
Intentar controlar o suprimir una parte de uno mismo.
- Ejemplo: “Intento controlar esa parte de mí que quiere relajarse cuando hay trabajo por hacer.”
- El control puede generar resistencia y aumentar el conflicto interno.
- Buena intención: Esta parte podría estar intentando mantenernos enfocados y productivos.
10. Indiferencia
Sentir indiferencia o falta de interés hacia una parte de uno mismo.
- Ejemplo: “Me siento indiferente hacia esa parte de mí que quiere explorar nuevas aficiones.”
- La indiferencia puede llevar a la desconexión y a la falta de autoconocimiento.
- Buena intención: Esta parte podría estar intentando protegernos de la decepción o el fracaso.
11. Resignación
Sentirse resignado a la presencia de una parte de uno mismo sin intentar cambiarla.
- Ejemplo: “Me siento resignado a que esa parte de mí siempre se sienta insegura en situaciones sociales.”
- La resignación puede impedirnos buscar soluciones y mejorar nuestras circunstancias internas.
- Buena intención: Esta parte puede estar intentando mantenernos en una zona de confort y seguridad.
12. Desprecio
Sentir desprecio o desdén hacia una parte de uno mismo.
- Ejemplo: “Desprecio esa parte de mí que siempre se queja en lugar de buscar soluciones.”
- El desprecio puede ser una barrera para la compasión y el entendimiento.
- Buena intención: Esta parte puede estar intentando señalar problemas que necesitan atención.
Es importante recordar que nuestras partes internas no actúan de estas maneras por ser malas o dañinas en sí mismas. Cada parte tiene una intención positiva y un deseo de ayudar al sistema en su totalidad. A menudo, lo hacen a partir de estrategias que desarrollaron en el pasado para protegernos de dolor o peligro. Al entender estas motivaciones, podemos trabajar con nuestras partes desde un lugar de compasión y curiosidad, permitiendo que el Self fluya libremente y facilitando así nuestro proceso de sanación y autoconocimiento.
Actitudes Sanadoras en la Sanación Personal
En contraste con las formas que dificultan nuestro avance, hay actitudes sanadoras que pueden facilitarnos el camino hacia la integración y el bienestar dentro del marco de Internal Family Systems (IFS) o Sistemas de la Familia Interna. Aquí te presentamos algunas de ellas:
1. Empatía
Entender y sentir compasión por uno mismo.
- Ejemplo: “Siento empatía por esa parte de mí que se siente herida y necesita consuelo.”
- La empatía es crucial para la sanación, permitiéndonos trabajar con nuestras partes de manera efectiva.
2. Curiosidad
Sentir interés y curiosidad por entenderse mejor uno mismo.
- Ejemplo: “Tengo curiosidad por entender por qué una parte de mí se siente tan ansiosa en ciertas situaciones.”
- La curiosidad puede abrir puertas al autoconocimiento y facilitar la integración de nuestras partes.
3. Aceptación
Aceptar la existencia de uno mismo sin juzgar.
- Ejemplo: “Acepto que hay una parte de mí que necesita tiempo para adaptarse a los cambios.”
- La aceptación puede reducir el conflicto interno y promover la armonía y la paz.
4. Colaboración
Buscar una manera de trabajar conjuntamente con uno mismo.
- Ejemplo: “Intento colaborar con esa parte de mí para encontrar nuevas soluciones en el trabajo interno, juntos somos equipo!”
- La colaboración puede fomentar la integración y el crecimiento personal.
En resumen, reconocer y trabajar con nuestras partes internas puede ser un desafío, pero es esencial para nuestro crecimiento y bienestar emocional. Al identificar las formas en que estamos detenidos, podemos comenzar a desarrollar actitudes sanadoras hacia estas partes que nos detienen sin quererelo para retomar nuestro camino hacia la sanación. La empatía, la curiosidad, la aceptación y la colaboración son clave para integrar nuestras partes y vivir de manera más armoniosa.